A propósito de las actividades como conferencistas de
nuestros dos expresidentes y de las aparentemente grandes sumas de dinero que
cobrar por esa labor, se mencionan cifras como 50,000 dólares americanos, que a
mí me parecen muy bien, porque tanto Toledo como García se lo merecen por sus
meritos, aunque no comulguemos políticamente con ellos.
No hay porque asombrarse que hayan cobrado US $ 50,000, Según http://www1.terra.com.co/midinero/articulo/html/mdi463.htm
Gary Kasparov cobra US $ 60,000, pero hay otros que cobran más como el
expresidente de USA Bill Clinton quien recibió US $ 300,000 por una conferencia de dos horas en Colombia. José María Aznar expresidente
de España cobra US $35,000. Se dice que Tiger Woods cobra por dos horas un
millón de dólares.
Es conocido que figuras públicas de la TV peruanas
cobran las presentaciones que ellos realizan en las empresas, también hace poco
una modelo que era alumna de la carrera de nutrición cobró una suma muy alta
por dictar una conferencia sobre nutrición, habiendo muchos expertos en la
materia más calificados que ella.
Por otro lado, la mayoría de los conferencistas nacionales sean
de arte, letras o ciencia no estamos acostumbrados a pedir dinero por nuestras
conferencias. Es más, ni siquiera pedimos que nos lleven y traigan de nuestras
casas. Algunos vamos con nuestro carro o en micro.
Algunos profesionales peruanos no cobran por sus conferencias
ya para ellos esos eventos son un trampolín a la fama, tras lo cual serán
conocidos y quizás contratados por empresas, aunque muchas veces esto último no
ocurre. He conocido a algunos conferencistas (la verdad muy pocos) que tienen
bastante dinero y no desean cobrar, lo hacen porque les gusta y se sienten muy
bien en contacto con el público. Muchas veces de ellos se aprovechan ciertas
instituciones lucrativas.
Lo que recomiendo es que los conferencistas que no quieren
cobrar por lo motivos antes mencionados a las instituciones lucrativas, pidan a
los organizadores unas entradas de cortesía y se las den a sus mejores alumnos
o a gente que los necesite.
Muchas veces me han invitado a participar en conferencias y
charlas en varias instituciones científicas o en colegio. Antes iba al lugar de
la conferencia sin pedir retribución alguna, ni menos el pago de la movilidad.
Pero luego de saber que hay gente, con menores calificaciones que la mía, pero
por aparecer en la televisión cobran por realizar presentaciones, pues decidí
comenzar a pedir lo mínimo.
Para mí, aunque se trate de una institución del estado o sin
fines de lucro, lo mínimo que se les puede pedir es que nos pongan la
movilidad. Que una persona de la organización vaya a nuestra casa con un
vehículo y luego nos regrese de la misma forma. No vale que nos diga: “le doy
15 soles y usted consigue su taxi”, eso es desconsiderado.
En caso de una institución privada o una que va a sacar un
provecho económico lo justo es pedir a esa institución una retribución
económica justa. Muchas veces, un
conferencista nacional siente vergüenza al
pedir dinero por una conferencia. Cuando uno lo hace no falta un colega que
exclama: “ah ya te crees lo máximo, no seas así”. Esa es una tara que debe eliminarse. Si uno está
descalificado para realizar una conferencia y la hace tan solo porque es
conocido o popular y cobra, pues sí, sería una vergüenza recibir dinero por
hacerla.
La pregunta que se viene es ¿cuánto cobrar? Pues bien, eso ya
depende de varios escenarios. Claro que no vamos a cobrar US$ 400,000 como el premio Nobel de Economía Paul Krugman,
pero tenemos que empezar con algo. En
USA de acuerdo con http://www.speaking.com/faq_meeting.php
los conferencistas prestigiosos de ese país cobran en promedio US$ 7,500,
mientras que las celebridades pueden cobrar desde US$ 20,000 hasta sumas
mayores a US$ 100,000 a lo que hay que sumar los pasajes de avión en primera para
dos personas (normalmente van acompañados), traslados, comidas, hotel y ciertos
caprichos que en algunos casos son desesperantes para los contratantes.
En el Perú, como mencioné párrafos anteriores, si se trata de
una institución sin fines de lucro la movilidad es esencial. Cuando una empresa que organiza eventos como
rubro principal lo contrata a uno, pues debe pagar por nuestros servicios y el precio que uno ponga está relacionado al
grado de instrucción y experiencia que uno tenga en el tema a disertar, así
como está el mercado de conferencistas, si eres único en la especialidad o no,
si tienes carisma, si llegas al público, el costo de entrada al evento, el
número de personas que asistirán, en fin. Yo pienso que el precio base para un
prestigioso profesional peruano podría cobrar entre mil a diez mil dólares por
su conferencia más viáticos. Los peruanos
ya consagrados y reconocidos en Latinoamérica podrían cobrar de veinte mil dólares a más.
La gente cree que ser conferencista es fácil, están
equivocados. Son largas horas dedicadas
al estudio, visitas sin horario a las bibliotecas, búsquedas incesantes a las bases de datos,
largas lecturas de revistas especializadas y finalmente la experiencia de vida
profesional. Luego tienes que dedicar tiempo para diseñar como será tu
conferencia, armar tu PowerPoint para lo cual buscarás figuras
ilustrativas y poner el texto lo más atractivo y didáctico posible. Luego preparas
lo que vas a decir, que no es nada fácil. Horas de ensayo, luego comer ligero, buscar
el terno más adecuado, la camisa planchada y finalmente contratar el taxi para
llegar puntual y listo. En otras palabras el trabajo del conferencista no es
sólo una hora, tiempo que dura usualmente una conferencia, sino que involucra
un trabajo previo.
Todos no pueden ser conferencistas, hay gente brillante en su
trabajo, pero es incapaz de hablar en público, se ponen muy nerviosos, no
hablan coherentemente, etc.
Lo que pasa es que hemos vivido en una burbuja, en el mundo los
políticos, los artistas, los profesionales, los científicos, entre otros cobran
cuando realizan conferencias. Incluso hay instituciones internacionales que brindan
el servicio de una serie grande de conferencistas, obviamente pagados, no es
gratis.
Empecemos por respetarnos, no es nada malo pedir una retribución
por realizar una conferencia, no sintamos vergüenza, lo que pasa es que todavía
no hay costumbre en el Perú de retribuir económicamente al conferencista, pero
ya los tiempos están cambiando. Ah, no olvide llevar sus recibos por honorarios
profesionales y pagar sus impuestos.
4 comentarios:
Hola
Muy interesante tu artículo, comparto todo lo que dices. Soy conferencista también y la gente no sabe que detrás de una charla hay horas y horas de preparación, lo cual es muy valioso.
Te hago una pregunta, cuanto podría cobrar un conferencista con poca experiencia? (en dolares)
Te agradezco la información.
1000 $
Hola, yo soy mexicana y, estoy empezando en esta área, ya he dado 2 conferencias pero no sé cuánto cobrar.
Hola, una consulta, sabes cuanto cobra un expresidente de latinoamerica como Vicente Fox, Luis Pastrana, Miguel Angel Rodriguez?
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