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miércoles, 4 de mayo de 2022

Plagio en las tesis de nuestros políticos

Respecto a los casos de plagio en las tesis de nuestros políticos se debe considerar los niveles de responsabilidad. No solo es responsable el tesista, también en mayor nivel son responsables el asesor, el jurado de tesis y las autoridades o dueños de la U chicha.  

Ser asesor tiene una gran responsabilidad y claro debe conocer el tema de tesis, dar el apoyo en equipos, infraestructura, reactivos y servicios, y guiar al estudiante en la ejecución de la investigación conducente a la tesis. El asesor es el que avala la calidad de la  tesis cuando el egresado la presente. El tesista puede pagar por los “servicios” de empresas que “hacen tesis” y presentarla a la universidad, pero si el asesor no da el visto bueno, esa tesis no se tramita.

Sin embargo en las universidades chicha existen los famosos y para mi temibles “metodólogos” u "orientadores" quienes tienen el poder de decidir si una investigación se presenta como tesis o no. Los metodólogos tienen tal poder que excede al del asesor e incluso lo reemplazan, convirtiéndose, en la práctica, en asesores. No importa que desconozca el tema, que no brinde asesoría ni forme investigadores, a la U chicha tan solo le interesa que se gradúen la mayor cantidad de estudiantes, así su “ranking y marketing” aumentan a pesar del nulo o bajo nivel académico de las tesis. El aporte académico y la contribución científica les importa un rábano.  Así como hay intrusismo profesional, también hay intrusismo en investigación y ese metodólogo, orientador o asesor que no actúa como tal yo hace tiempo lo he llamado asesor intruso.  

El jurado también es responsable porque debe velar por la calidad académica de las tesis, no exclusivamente sobre la forma.  Todos conocemos varios tipos de jurado, desde los racionales y entusiastas que aportan para enriquecer la tesis hasta los irascibles y disconformistas al extremo que quieren que el tesista haga cosas fuera del nivel del grado, alcance de la tesis o caprichos que no aportan nada; pasando por los jurados “amigos de todos”. 

Los dueños de las U chicha tienen gran responsabilidad ya que ellos pervierten el procedimiento para la aprobación de las tesis. En la práctica los “asesores intrusos” solo revisan la forma, pero no el aporte académico de la tesis. Incentivan económicamente a los “asesores intrusos” así como a los jurados que no contradicen ni observan las propuestas de tesis. Si alguien osa hacer tan solo una ligera observación contra una tesis, pues es visto como un traidor y nunca más es llamado como jurado y cuando termina el semestre no le renuevan el contrato. 

Todo este problema, no solo del plagio sino también de la nula calidad académica de las tesis se podría resolver si los dueños y autoridades de las U  chicha privilegiarán la calidad académica de las tesis, para lo cual requerirían tener docentes investigadores, lo cual ahora adolecen.  Además, ellos deben condicionar que el asesor sea de la misma profesión y   especialidad del que se gradúa el tesista y con publicaciones en su haber. En el caso del jurado igual, con el añadido que algunos de ellos deben ser de otras universidades nacionales o extranjeras mejor rankeadas que la universidad del tesista.

Nota: Seguro que hay algunos metodólogos bien intencionados, pero yo me refiero a los  otros que asumen funciones de asesor de tesis sin merecerlo.