Translate

domingo, 3 de abril de 2011

Ceremonia de graduación promoción 2011 Química Universidad Nacional Mayor de San Marcos

El día de ayer se celebró la ceremonia de graduación de la promoción “El hombre encuentra a Dios detrás de cada puerta que la ciencia logra abrir”. Los integrantes de esta promoción tuvieron a bien designar como padrinos al suscrito y a la química Angélica Rodríguez Best. Yo los he conocido desde que ingresaron a la universidad, prácticamente los he visto crecer físicamente e intelectualmente. Muchos ahora trabajan, otros se han casado, ya tienen sus familias, pero siempre guardarán en su corazón un lugar para la Facultad de Química e Ingeniería Química de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

Este es el discurso que realicé en esa hermosa ceremonia:

Damas y caballeros muy buenas tardes:

Estimados egresados:

Durante sus vidas han ocurrido una serie de hitos importantes en su educación. Son hechos que han marcado vuestro futuro. Y asociado a estos hitos están un conjunto de sentimientos.

El primer día en el colegio, lleno de vacilaciones, temores, penas y lloriqueos. Los padres compungidos, con un dolor en el alma, tienen que dejarlos solos por unas horas en el colegio. Todo por el bien de su educación.

El paso a la secundaria. Lleno de ilusiones y esperanzas. Ya no son niños, sino adolescentes, llenos de ideales e inquietudes diversas.

El ingreso a la Universidad es otro de los hechos más importantes en sus vidas. Aunque previamente está el temido examen de ingreso. Miles postulan, pero sólo unos pocos logran las ansiadas vacantes. La angustia, el nerviosismo tradicional, la ilusión de ser mejor, confluyen en todo el proceso de ingreso a la Universidad.

Ya en la Universidad, el reto es ahora aprobar los cursos. No es fácil. Hay cursos de matemáticas, física, letras, y, por supuesto los de la carrera de química.

Solo el trabajo tesonero, la dedicación completa, las largas horas de estudio y el apoyo familiar les permitieron aprobar esos cursos. Ah, no olvidemos que estudiar química no es fácil. Poca gente tiene el talento, habilidades, destrezas e inteligencia, para las ciencias. Hay que tener vocación, pasión por la química, para soportar largas lecturas de textos, tediosas clases teóricas, extensivas horas en el laboratorio, adquirir vehementemente las competencias personales y profesionales que garanticen el éxito profesional, horas y horas de estudio consagradas a esta hermosa ciencia.

Ahora ustedes completan otro hito vital e importante en sus vidas. El egresar de la carrera de química. No fue nada fácil, se requiere mucho sacrificio. ¿Cuántos ingresan y cuántos egresan? Muy pocos. ¿Cuántos postularon a la Universidad y cuántos ingresaron muy pocos. Estos son hechos que avalan el merito de ustedes jóvenes profesionales. Sólo ustedes lo lograron, sólo ustedes tuvieron éxito. Por eso sus profesores y familiares les admiran y felicitan y les auguramos un futuro prometedor.

Hoy en día ustedes afrontan otro reto. El lograr el éxito profesional, camino al cual no está exento de dificultades, penurias y sacrificios. Y más aún el mayor de los hitos, el reto de lograr el éxito personal, quizás el más difícil de todos. No se trata de ganar mucho dinero o acumular grandes riquezas, se trata de ser feliz en lo que uno hace.

Yo hablo ahora a nombre de todos sus profesores: nosotros tenemos fe en que ustedes lograran el éxito personal, ya que ustedes tienen la personalidad, las herramientas metodológicas de un científico y los valores personales para lograrlo.

Allá afuera, les espera estimados ex alumnos, un futuro brillante y promisorio, tan solo queda poner en práctica los que ustedes aprendieron de sus padres y profesores.

Buenas tardes.


























No hay comentarios: